Hace falta decir que el Institut Català d’Avaluacions Mèdiques tiene un papel muy cierto útil : Comprobar las declaraciones de baja, sobre todo cuando se trata de enfermedades de larga duración, cuando alguien durante muchos meses no va al trabajo. Conozco esta institución. Porque hace unos años me fue por ahí para entregar una atestación. Lo reclamaban para una chica que estaba en el hospital. Sin embargo al funcionario no le bastaba la atestación. Hacía falta que venga ella, personalmente y traía esta atestación. Explicaba que todavía está en el hospital Sant Pau, después de una operación cirugía. Necesitaba esta autorización del . Institut Català d’Avaluacions Mèdiques para seguir estando de baja y cobrar los pagos de la seguridad social. Toda mi argumentación fue en vano. Que se puede comprobar fácilmente con una llamada telefónica que está hospitalizada. Que no puede dejar la cama en el hospital para ir a la sede del Institut etc. Entonces he aprendido que esta gente, de verdad, no tiene piedad. Se trata simplemente de una burocracia y este hombre me da pena, porque no comprende que por ahí no se actúa con buena voluntad, o con la ley del corazón, para usar la terminología hegeliana.
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Protesta delante del Institut Català d’Avaluacions Mèdiques